HISTORIA DE ESPAÑA
El sexenio
revolucionario (1868-1874)
La revolución de 1868, "la
Gloriosa", según sus artífices. Es una nueva revolución
liberal basada en el golpismo militar.
- Se inicia con el pronunciamiento de Topete
al frente de la flota de guerra en Cádiz en septiembre
de 1868.
- Conforme a lo acordado en el Pacto de
Ostende, los militares de los partidos comprometidos se
van sumando y aportando las tropas a sus órdenes.
- Se unen los militares exiliados, entre
ellos Prim.
- Al grito de "abajo las
quintas y abajo los consumos", prometen la
supresión del servicio militar obligatorio que ha
establecido el propio liberalismo y ese odioso impuesto
que grava los alimentos que se introducen en las ciudades.
- Se van formando Juntas
revolucionarios en diversas localidades
españolas. De nuevo, algunos de los sectores populares
de los que no han sacado nada con el liberalismo, sino
que están aún más oprimidos, serán llevados a confiar
en los que dicen actuar en nombre del Pueblo Soberano.
Otros sectores apoyan al carlismo, presto a reorganizarse
en torno a su nuevo pretendiente a la corona, Carlos VII.
- La crisis financiera de 1864-1868, causada
por la euforia especulativa del desarrollismo de O'Donnell
y por el afán de enriquecerse de las nuevas hornadas de
liberales llegados al poder con la revolución de 1854,
se agrava extraordinariamente con la crisis de
subsistencias de 1868-1871 producida por las malas
cosechas de 1867-68.
El hambre subsiguiente se extiende en las clases
populares, ya masivamente empobrecidas y despojadas por
las desamortizaciones promovidas en beneficio propio por
esos liberales. Ya era posible la utilización de los
exasperados por la miseria, con las habituales promesas
liberales de convertir al Pueblo en Soberano.
- El gobierno en manos de los moderados
reúne fuerzas para hacer frente a los militares
golpistas, pero su escaso ejército es derrotado en la
batalla del Puente de Alcolea, sobre el Guadalquivir, en
Córdoba, el 28 de septiembre de 1868.
- El 29 de septiembre de 1868, la Junta
revolucionaria de Madrid recibe el poder de manos del
último gobierno de los moderados. Al día siguiente, se
exilia Isabel II.
- El ejército golpista a las órdenes del
general Serrano, caudillo del Partido de la Unión
Liberal, entra en Madrid para ponerse al frente de la
revolución y someter a las Juntas.
- Isabel II, a la sazón en San Sebastián,
tomando baños de mar para sus dolencias cutáneas, pasa
la frontera y se exilia, quedando así destronada.
- Además del destronamiento de Isabel II,
la consecuencia de la revolución de 1868 es que se abre
un período de seis años de inestabilidad que la
historia conoce como el sexenio revolucionario,
algún libro para uso de escolares lo ha
empezado a denominar "sexenio democrático",
pero de democrático no tiene más que el sufragio
universal masculino para mayores de 25 años, que hace
pasar el electorado del 2'67% al 25% de la población,
que desembocará en la abstención del 60% y que, como
siempre, se verá manipulado y falseado, en este caso por
los caudillos militares golpistas de la Gloriosa.
- En el sexenio revolucionario, se irán
sucediendo y fracasando toda clase de formas de Estado,
no sólo infinidad de gobiernos.
Gobierno provisional de Serrano,
caudillo del Partido de la Unión Liberal, con Prim, caudillo del
Partido Progresista como hombre fuerte.
- Medidas de ataque a la Iglesia para
significarse como más revolucionarios que los moderados,
porque tampoco tienen ninguna preocupación social.
- Sometimiento y eliminación de las Juntas
revolucionarias, algunas por la fuerza de las armas, como
la de Cádiz y la de Málaga.
- Elecciones para Cortes Constituyentes por
sufragio universal, conforme al pacto de Ostende. Queda
en primer lugar la coalición formada por los
progresistas, los unionistas y la parte de los
demócratas no incompatible con la monarquía, sobre los
republicanos escindidos ahora del Partido Demócrata. (Gráfica 2)
Sigue el mismo gobierno de Serrano y Prim.
- Constitución de 1869 (Las
Constituciones españolas), establece el ya implantado sufragio universal
y la libertad de cultos, aunque reconociendo que la
religión católica es la de los españoles; es bicameral
y mantiene la monarquía.
Regencia de Serrano, con Prim como jefe
del Gobierno (1869-1871). Tras ardua
busca, Prim encuentra un príncipe que acepta ser rey en este
inestable trono
Reinado de Amadeo I de
Saboya (1871-1873). Aunque parece efímero y lo es, dura
más que otras etapas. Los motivos de su inestabilidad son:
- No sólo que es extranjero
y que la aristocracia isabelina le hace el vacío y el
pueblo se le mofa,
- sino que además es
miembro de una dinastía excomulgada por haberse
adueñado de los Estados Pontificios y de las propiedades
de la Iglesia en el proceso de la unificación de Italia..
- Su única base sólida, el
apoyo de Prim, desaparece desde antes de empezar, porque
éste es asesinado en un atentado cometido a finales de
1870, mientras llegaba Amadeo a España. Es el primero de
la serie de los jefes del gobierno de España que mueren
en el ejercicio de su cargo víctimas de atentados. El
asesinato de Prim aún no ha sido esclarecido.
Prim tenía demasiados enemigos y algunos tuvieron mucha
influencia después, como el duque de Montpensier,
la masonería, Estados Unidos...
El asesinato de Prim 1:
La Comisión Prim halla en 2012 la lista completa de los
asesinos del general en 1870, con Montpensier a la cabeza
El asesinato de Prim 2
El asesinato de Prim
3: El papel de los masones en el asesinato de Prim
Resumen
del sumario instruido por el asesinato del general Prim
- Llegó a haber durante el
sexenio hasta tres guerras civiles superpuestas:
- La primera guerra
secesionista de Cuba (1868-1878), que había
comenzado nada más triunfar la Gloriosa, y que
no conseguían dominarla.
- La 3ª Guerra
Carlista (1872-1876), que empieza ahora el nuevo
pretendiente carlista, Carlos VII, el cual irá
consiguiendo crecientes apoyos populares, que le
dan el control de las zonas rurales de Navarra y
Vascongadas y en parte de las de Aragón,
Cataluña, el Maestrazgo, y de algunas en Galicia
y Castilla.
También se unirán al carlismo toda una serie de
personajes del bando isabelino, ahora asustados
por la revolución y disgustados por el
destronamiento de Isabel II.
La inestabilidad creciente del bando liberal
dará posibilidades de triunfo al carlismo.
- Las insurrecciones
republicanas, preludio del cantonalismo.
- Las
actividades de la I Internacional se inician en España
desde 1868 mismo, nada más iniciarse el sexenio.
Consisten por ahora en la captación de seguidores por el
enviado de la Internacional, Fanelli, anarquista, cosa que va logrando en gran
medida. Los seguidores de Marx apenas se reducen a Pablo
Iglesias y su pequeño grupo. Hay ya algunas
convocatorias de huelga por los internacionalistas en
Alcoy y Barcelona, pero más que sus acciones
revolucionarias, aún inexistentes casi, es la impresión
de las noticias que llegan de las que realizan en el
extranjero, como la revolución de la Comuna de París en
1871, lo que hace inquietante la presencia de la
Internacional en España para los políticos del sexenio,
que no pasaban de liberales.
- Los partidos de la
situación se van dividiendo y subdividiendo. Llega a
haber hasta 25 grupos parlamentarios.
- Sentarse sobre las
bayonetas no le resultaba cómodo a Amadeo.
El título de Príncipe de
Godoy y Espartero
Amadeo de Saboya se va
limitando a firmar leyes y decretos, pero va comprobando que cada
vez se desestabilizaba más la situación y que su presencia es
inútil.
Abdica tras firmar la disolución del arma de artillería, medida
con la que estaba disconforme.
La I República. 1873
- Las mismas Cortes de la
monarquía de Amadeo, al abdicar éste en febrero de 1873,
proclaman la República el mismo día.
La bandera de España sigue siendo la bicolor,
formada por dos fajas rojas y otra amarilla de doble
anchura entre ellas; ésta es por lo tanto también la
bandera republicana de la I República. Será
cambiada en la II República (1931).
- Además de los problemas
anteriores, la I República tiene
- el de la escasez
de republicanos,
- el significado
ultraextremista políticamente de la República
que le dan sus partidarios y no de ser un sistema
institucional para proveer de jefes de Estado de
forma diferente a la monarquía hereditaria.
Porque los que se proclman republicanos es paara
exhibir que son más ultrarrevolucionarios.
- la división de
los republicanos en
- unitarios
y
- federales
(considerados como los más
revolucionarios), subdivididos en
- "benévolos",
partidarios de implantar el
sistema republicano federal desde
las Cortes, e
- "intransigentes",
que aún exhiben más extremismo
por ser partidarios de implantar
la república mediante la
insurrección.
- No les da tiempo de
aprobar una nueva Constitución por lo que técnicamente
el Jefe del Estado se llama Presidente del poder
ejecutivo y no de la República
- Hay hasta cuatro
Presidentes del poder ejecutivo:
- Figueras convoca
elecciones para Cortes Constituyentes y hay un 60%
de abstención. Las Cortes proclaman la República
Federal. Figueras huye.
- Pi y Margall el
gran teórico de la república, tiene ahora su
oportunidad, intenta hacer aprobar en las Cortes
una constitución republicana federal, que
proclamaba como estados a las regiones españolas,
entre ellas Navarra como un Estado distinto de Vascongadas por la insistencia de
los diputados navarros.
(Ver el Proyecto
de Constitución de 1873).
- Le estalla
el cantonalismo,
insurrección que va proclamando como
Estados diversas partes de España en
guerra contra la República de Pi y
Margall y algunos de ellos en guerra
entre sí.
- Salmerón tiene
que emplear el ejército contra la insurreción
cantonal, Salmerón se niega a firmar las penas
de muerte que le exigen para disciplinar el
ejército.
- Castelar, el más
famoso de los republicanos, ahora gobierna
dictatorialmente.
Cierra las Cortes y trata de controlar por la
fuerza la insurrección cantonal.
Van siendo sometidos los cantones; no el de
Cartagena que tiene la flota y Madrid, no.
Previéndose la destitución de Castelar, se
prepara un golpe de Estado para impedir, sobre
todo, el triunfo del carlismo, que se temía como
probable ante el desprestigio del liberalismo
bajo la república.
- Golpe de Estado
del general Pavía (3.01.1874): disuelve por la
fuerza las Cortes y obliga a los jefes parlamentarios a
establecer un caudillo de la república más estable.
(Dice un alfonsino como el marqués de Valdeiglesias,
director de la Época, "órgano" de Cánovas,
comentando el golpe de Pavía: "Castelar obró como
buen español, pues gobiernos como los de Pi y Salmerón
llevaban el país al abismo, a pesar de todas las rectas
intenciones, y el final hubiera sido, en el mejor de los
casos, el triunfo del carlismo". 70
años de Periodismo. Memorias. 1949, pág. 215).
- Interinidad de
Serrano. 1874
- Fortalece el
ejército para impedir el triunfo del carlismo.
- Termina con la
insurrección cantonal, sometiendo el cantón de
Cartagena.
- Prohíbe la
Internacional en España.
- Consigue levantar
el asedio de Bilbao por los carlistas, pero estos
continúan la resistencia y aún conseguirán
nuevas victorias.
- También para
cerrar el paso de los carlistas al poder, se
prepara la restauración de la monarquía liberal,
no con la desprestigiada Isabel II, sino con su
hijo Alfonso.
- Los "monárquicos"
o alfonsinos están dirigidos como gran novedad
por un civil Cánovas del Castillo, que además
quiere apartar a los militares del control de la
política.
- Los republicanos
consienten tácitamente, como consintieron el
golpe de Pavía, porque no se trata de salvar la
república, también desprestigiada, sino el
liberalismo.
- Pero Serrano se va
eternizando en su interinidad, como hacen los que
convierten la provisionalidad en permanencia.
Serrano la llamaba dictadura, los que la llamaban
interinidad eran los que la consideraban un
tránsito a la monarquía liberal.
- Al final, es
también un pronunciamiento militar, la Saguntada,
lo que corta la situación y da paso a la
Restauración: el general Martínez Campos en
Sagunto proclama rey a Alfonso XII el 29.12.1874.
Abandonado el poder por Serrano, las demás
fuerzas liberales consienten que Cánovas
establezca un gobierno dos días después del
golpe.
Es la vuelta al punto de
partida, gastadas y fracasadas todas las formas de Estado de la
revolución liberal: monarquía liberal, gobierno provisional,
regencia, monarquía demócrataliberal, republica unitaria,
república federal, interinidad y otra vez monarquía liberal.
La revolución de 1868, la Gloriosa, había comenzado al grito de
"Viva España con honra".
El sufragio universal, que había figurado en
la Constitución de Cádiz, no se reimplantó hasta 1868, y eso
efímeramente, porque los liberales argumentaban que "su
puesta en práctica daría el poder a los carlistas"
todavía a mediados del XIX. Pacheco -uno de los jefes liberales-
calculaba en la época de la revolución de 1854 que "si
pudieran votar todos los españoles, el carlismo obtendría el 50
% de los sufragios, los demócratas y republicanos un 25
%, y otro tanto 'los verdaderos liberales', esto es los
progresistas y los puritanos -o'donnellistas-, ya que con los
moderados puros no se podía contar" (José Luis Comellas, Isabel
II, 4ª ed 2004, págs. 223-4, y V. G. Kiernan, La
revolución de 1854, pág. 117). El carlismo dejaría de ser
mayoritario en el siglo siguiente debido fundamentalmente, entre
otras causas, al proceso de descristianización de las naciones
de Occidente que llevó consigo el liberalismo en los siglos de
la Edad Contemporánea.
El árbol de Guernica en 1874 es carlista
HISTORIA DE ESPAÑA