La crisis del grupo Prisa
Crónica del siglo XXI

En un año el derrumbe de la cotización de Prisa pasa del 80%
La acción toca su mínimo histórico

Libertad Digital 17.02.2009

Las acciones de Prisa han sufrido un duro varapalo este martes, 17.02.2009, y han tocado su mínimo histórico de cotización con otra pérdida del 3%.

El Grupo Prisa está sufriendo un desplome bursátil sin precedentes. Los problemas financieros de la empresa editorial, la dificultad para refinanciar su deuda y la imposibilidad de vender su deficitario “Digital +” para hacer frente a sus obligaciones de pago ahuyentan a los inversores.

Los títulos de Prisa bajaron este martes, 17.02.2009, en la Bolsa española un 3%, aunque en algunos momentos de la sesión la caída fue del 4,6%. En los últimos doce meses el derrumbe de la cotización alcanza el 80,6%.

Aunque no se trata de una caída puntual. Las acciones de Prisa están en caída libre desde mayo de 2007, cuando se vislumbraba ya que Jesús de Polanco abandonaría la presidencia del grupo. El empresario falleció en julio y desde entonces la editorial no ha levantado cabeza.

Además, la irrupción de La Sexta como cadena que aglutina las tendencias de la izquierda televisiva española y los apoyos del Gobierno a la cadena de Jaume Roures -en la guerra del fútbol que mantienen Audivisual Sport y Mediapro- ha terminado de dar la puntilla a un grupo que antaño era uno de los referentes en la prensa española.

Reestructuración de la compañía

El mercado descuenta que Prisa ha desistido en sus esfuerzos por la venta de “Digital +”, ante la falta de ofertas firmes para su adquisición, ya que tanto Vivendi como Telefónica, sus principales pretendientes, discrepaban sobre el valor de la plataforma digital de pago.

Este fracaso, unido a la renuncia del responsable de negocio de televisión de pago, Carlos Abad, sustituido por el director general de compras de derechos, Ignacio Campo, ha llevado a la empresa a una completa reestructuración del área audiovisual.

Según recoge el diario
Expansión, el grupo Prisa quedaría dividido en cinco nuevas áreas de negocio: televisión de pago, televisión en abierto en España, televisión en abierto en Portugal, producción audiovisual y dirección de operaciones.

Un segundo reto que se plantea la empresa en estos momentos es el de liquidar su deuda de 4.850 millones de euros, comenzando por devolver antes del 31 de marzo el crédito puente de 1.950 millones de euros.

De este modo, el grupo trata de llegar a un acuerdo con sus acreedores bancarios. Además, lanzará emisiones de obligaciones por valor de 2.000 millones de euros y dará entrada a socios en su capital o en el de sus filiales (El País, Santillana, Unión Radio y Media Capital).